
El Gobierno Nacional dispuso la eliminación del Registro Único del Transporte Automotor (RUTA), una herramienta creada para regular el transporte automotor de cargas, tanto interjurisdiccional como internacional. Mediante el Decreto 1109/2024, publicado en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo modificó la Ley N° 24.653 con el objetivo de reducir barreras administrativas y fomentar un modelo económico más ágil y competitivo. Según el texto del decreto, el RUTA generaba duplicidad de funciones y costos operativos innecesarios que entorpecían la actividad económica y la productividad del sector.
La normativa establece la modificación de los artículos 6° y 11 de la Ley N° 24.653, eliminando el requisito de inscripción en el registro para los transportistas de carga. Según el decreto, el registro representaba una “carga administrativa” que generaba dispendio de recursos públicos y burocracia sin utilidad práctica. La fuente oficial también destaca que las tareas de fiscalización y control sobre los transportistas continuarán a través de otras herramientas normativas y requisitos obligatorios como la revisión técnica y la cobertura de seguros.
Cambios normativos
El Decreto 1109/2024 redefine el marco regulatorio del transporte de cargas en Argentina. El nuevo artículo 6° de la Ley N° 24.653 ahora regula exclusivamente el transporte de cargas peligrosas, estableciendo que dichas actividades deben ajustarse a los regímenes de seguridad vial vigentes. Por otro lado, el artículo 11 establece sanciones económicas por incumplimientos en los requisitos establecidos por la ley y su reglamentación. Estas multas se fijarán en Unidades de Sanción Económica, equivalentes al precio de 100 litros de gasoil por cada unidad, con un monto máximo de 5.000 unidades en caso de reincidencia.
La medida forma parte de una política general de desregulación administrativa. Según el texto oficial, la eliminación del RUTA según sostienen desde el Gobierno, busca liberar al sector de la duplicación de trámites, aliviando los costos operativos y fomentando la actividad económica. Indican que los transportistas de carga ya no deberán presentar documentación que, en muchos casos, ya se encuentra en poder de otras áreas de la Administración Pública.
Implicancias para el sector
El transporte automotor de cargas representa un sector estratégico para la economía nacional. Las operaciones interjurisdiccionales e internacionales constituyen un eslabón clave en la logística y el comercio exterior del país. Con la eliminación del RUTA, desde el Gobierno apuntan a que las empresas del sector puedan operar con mayor libertad, reduciendo los tiempos administrativos y optimizando recursos.
A pesar de este cambio, el decreto mantiene los controles esenciales para garantizar la seguridad y el correcto funcionamiento del transporte. Los transportistas deberán cumplir con requisitos básicos como la revisión técnica obligatoria, la licencia de conducir correspondiente y seguros vigentes para sus vehículos. Según el Poder Ejecutivo, estas medidas aseguran el equilibrio entre la desregulación económica y la seguridad vial.
Reacciones del sector
Roberto Rivero, Director Ejecutivo de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), expresó su desacuerdo con la eliminación del RUTA y destacó los beneficios que el registro ofrecía a los empresarios del sector. Según Rivero, el RUTA no era un trámite absurdo, sino una herramienta útil que permitía identificar a los transportistas que operaban dentro de la legalidad y que mantenían al día los requisitos fiscales y administrativos. Además, indicó que el registro proporcionaba estadísticas fundamentales sobre la cantidad real de camiones en circulación, algo que ahora será más difícil de rastrear.
El dirigente señaló que la medida tiene implicancias preocupantes para el sector ya que beneficia a quienes operan al margen de la ley, que ahora ya no tendrán que presentar una flota registrada ni someterse a controles de estado vehicular.
Por otro lado, señaló que la eliminación del RUTA perjudica a los transportistas que adquirían unidades cero kilómetros, ya que el registro les otorgaba una alícuota preferencial al momento de inscribir los vehículos. “Antes, el costo era un valor fijo de 90.000 pesos, pero ahora, al desaparecer el RUTA, se aplica un porcentaje del valor del vehículo que puede superar el 1%. Esto encarece enormemente los costos para los transportistas en regla”, explicó Rivero.
En ese marco, el impacto de esta medida genera opiniones encontradas. Desde FADEEAC advierten que la eliminación del RUTA perjudica a los transportistas en regla y encarece significativamente los costos de renovación de flotas, mientras que el Gobierno Nacional sostiene que este cambio alivia la burocracia, reduce trabas administrativas y fomenta la competitividad del sector. Ambas perspectivas reflejan una búsqueda de mayor eficiencia económica en un sector estratégico como lo es el transporte.
Fuente: InfoBae