Ante lo que considera un paro encubierto, Aerolíneas Argentinas anunció que reprograma diez vuelos de cabotaje e internacionales desde este martes, para evitar cancelaciones. La empresa estatal lo decidió ante una nueva serie de asambleas convocadas por dos gremios aeronáuticos, medidas de fuerzas que fueron denunciadas ante la Secretaría de Transporte y por la que el Gobierno ya procedió al descuento de sueldo de los que trabajadores que se plegaron.
Los cambios de horario incluyen modificaciones para la partida de vuelos desde Córdoba y Mendoza este martes. También habrá reprogramaciones en vuelos de este miércoles a Estados Unidos, México y España. Y otros a confirmar para este viernes.
"Aerolíneas Argentinas reprogramará vuelos afectados por las asambleas anunciadas por los gremios Asociación Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y Asociación Argentina de Aeronavegantes (gremio de tripulantes) con el fin de preservar a sus pasajeros y minimizar el impacto de estas medidas de fuerza en sus planes de viaje", comenzó su comunicado Aerolíneas Argentinas.
La compañía consideró que las protestas sindicales "constituyen un paro encubierto, situación que ya fue denunciada ante la Secretaría de Trabajo, y que derivó en descuentos salariales para más de 200 empleados".
Después, el comunicado expuso el operativo de la aerolínea estatal para sortear las asambleas gremiales, "En el caso de los vuelos afectados durante el martes entre las 10 y las 13 por las asambleas en las terminales de Córdoba y Mendoza, se modificarán los horarios de un total de 10 vuelos sin ninguna cancelación".
Así, comunicaron que este miércoles se adelantarán los vuelos "con destino a Miami y a Cancún, mientras que se demorará el vuelo a Madrid, todo ello para evitar las asambleas anunciadas para las 21".
De esa manera, la aerolíneas considera que podrá evitar cancelaciones y que todos los vuelos del día se efectúen, pese a las medidas de fuerzas convocadas por Pablo Biró, sindicalista al frente de APLA, y Juan Pablo Brey, de los tripulantes de cabina nucleados en AAA.
"Por último, en relación a los vuelos afectados por las asambleas en Aeroparque entre las 6 y las 9 horas del viernes, las modificaciones se realizarán durante los próximos días", comunicó Aerolíneas Argentinas respecto de las medidas que tomará para amainar el efecto de las medidas gremiales adoptadas para el viernes en el aeropuerto metropolitano Jorge Newbery.
El viernes pasado, Aerolíneas Argentinas realizó una presentación ante la Secretaría de Transporte, a cargo de Franco Mogetta, en la que denunció un "paro encubierto" de los gremios APLA y AAA, bajo el argumento de "supuestas asambleas informativas". Está confirmado además, que la empresa volverá a descontar el día a los trabajadores que participen de las asambleas.
"De acuerdo a lo difundido por los propios sindicatos, entre el 19 y 30 de agosto, las acciones abarcan más de 14 horas de asambleas en distintas terminales aéreas, que constituyen una efectiva y total paralización de la actividad de la compañía en esas y otras ubicaciones", había señalado el viernes la aerolínea estatal.
A su vez, estimó en más de 1.500 los pasajeros afectados, en 16 las cancelaciones y en 85 las demoras informadas.
"El que no trabaja, no cobra", la advertencia del Gobierno
Al presentar la denuncia contra los dos gremios aeronáuticos, el viernes Aerolíneas Argentinas hizo eco de la advertencia que días antes había lanzado la Secretaría de Transporta: "El que no trabaja, no cobra".
Afirmó en su comunicado del viernes Aerolíneas Argentinas: "Por este motivo, la compañía avanzó con la denuncia a dichos gremios ante la autoridad laboral solicitando el cese de esta conducta abusiva, y aplicará además descuentos salariales a más de 200 pilotos, copilotos y tripulantes de cabina".
Según adelantaron en ese entonces desde la empresa, los descuentos alcanzarían a más de 425 trabajadores, 200 trabajadores de Aerolíneas Argentinas ligados a APLA y AAA; unos 212 trabajadores de Intercargo ligados a APA y a 13 de la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA).
Por su parte, Biró, el kirchnerista al frente de APLA, había salido el jueves al cruce del Gobierno. "No tenemos interlocución política. Lo que uno escucha son amenazas, títulos de que van a desregular, que van a vender Intercargo, Da la idea de que hay intencionalidad de hacerle daños y perjuicio al Estado para beneficiar a sus amigos, socios o mandantes. o hay una mala praxis que no tiene nombre", declaró, en conferencia de prensa.
Fuente: Clarín
