
La petrolera YPF firmó este viernes con la empresa Quintana Energy los documentos finales para concretar el traspaso de seis áreas convencionales que integran el clúster Mendoza Sur, y que formaban parte de la primera etapa del Proyecto Andes que marcaron el inicio de desinversión de la compañía en la provincia cuyana. Quintana, una petrolera independiente creada por Carlos Gilardone, que a su vez es titular de FDC, la principal consultora especializada en el estudio de reservorios de la Argentina, pasará a operar los bloques Altiplanicie del Payún, Cañadón Amarillo, El Portón, Chihuido de la Salina y Chihuido de la Salina Sur. También tendrá una participación en Confluencia Sur (un área no operada). En fenrero de este año, Quintana tomó el control de Estación Fernández Oro (EFO), un campo de Río Negro, donde incorporó unos 80 trabajadores a su nómina.
YPF ya había logrado avanzar en la desinversión de los bloques que conformaban los clústers Mendoza Norte y Llancanelo, tras la aprobación de la provincia de las cesiones y prórrogas de las concesiones correspondientes. Ahora al hacer lo propio con Mendoza Sur cierra en la provincia la primera etapa de su estrategia que busca hacer foco en Vaca Muerta y optimizar el rendimiento de sus inversiones.
Las áreas incluidas en el clúster Llancanelo son operadas desde noviembre pasado por PCR, en tanto, que la petrolera nacional concretó la cesión de los bloques Barrancas, Vizcacheras, La Ventana y Río Tunuyán incluidas en el clúster Mendoza Norte, a Petróleos Sudamericanos, y tenía pendiente el cierre de la documentación legal con la UTE Quintana Energy, una petrolera independiente con actividad en Santa Cruz y al sur de Chile, y la compañía de servicios TSB.
La ampliación del Proyecto Andes
Esta semana, el directorio de YPF aprobó la ampliación del Proyecto Andes con un esquema de desinversión de las últimas 12 áreas convencionales, lo que incluye la emblemática Manantiales Behr, en la provincia de Chubut, y los clústers Chachahuen y Malargüe, en Mendoza, además de su participación en otros bloques en los que no es operadora.
A partir de que se logre el cierre de esta segunda etapa, YPF sólo tendrá presencia en la provincia cuyana a través de la operación de la Refineria Luján de Cuyo y los compromisos de exploración y eventual pase a desarrollo de la extensión de Vaca Muerta en el sur mendocino, algo que viene dando resultados promisorios en los últimos meses.
Para la provincia, el cierre de la cesión del clúster Mendoza Sur consolida un esquema que permite a operadores especializados impulsar la producción, revitalizar áreas maduras y fortalecer la actividad hidrocarburífera, explicaron fuentes de la gobernación al señalar que “no se trataba solo de un cambio de jugadores sino de definir y exigir qué modelo productivo seguir con el valor agregado de un desarrollo industrial en El Portón y la exploración no convencional en Cañadón Amarillo«.
Al momento de la autorización de la provincia de la transferencia del clúster, la producción en Cañadón Amarillo era de 155m3/d de petróleo y 18.000m3/d de gas; en Altiplanicie del Payún de 25m3/d; en El Portón de 2m3/d de petróleo y 11.000m3/d de gas; en Chihuido de la Salina de 50m3/d de petróleo y 200.000m3/d de gas; en Chihuido de la Salina Sur de 35m3/d de petróleo y 115.000m3/d de gas y en Confluencia Sur de 130 m³/d y 13.000m3/d de gas.
Para la provincia este modelo permite atraer nuevas inversiones, dinamizar el sector hidrocarburífero, asegurar el desarrollo sostenible de la industria en Mendoza y fortalecer el crecimiento de la producción, que logró un incremento superior al 1% en 2024 respecto de 2023, alcanzando un total de 20,6 millones de barriles anuales a pesar del declive natural de los yacimientos maduros.
Este traspaso de responsabilidadeds no solo garantiza la continuidad operativa de las áreas sino que también representa una oportunidad para generar empleo, fomentar inversiones, viabilizar nuevos proyectos y potenciar la economía local. La presencia de operadores especializados contribuye a una gestión eficiente y responsable, promoviendo la adopción de tecnologías innovadoras que optimicen la explotación de los recursos.
Fuente: EconoJournal